Sin duda que esta ardillita golosa no tenia ni idea de lo que le pasaría después de comer tantas manzanas fermentadas, pero el resultado de ello quedó registrado en la cámara de quienes la observaban atentamente, mientras reían al ver como no podía coordinar sus movimientos, debido a su evidente estado de ebriedad.
Lo mas probable es que de ahora en adelante, se lo pensará dos veces antes de comer esta deliciosa fruta en exceso.